Jair Messias Bolsonaro sabe que una derrota de Mauricio Macri en las elecciones de Argentina también cambiaría el mapa regional que empezó a configurarse con la salida de Dilma Rousseff de la presidencia de Brasil. Por eso viajó a Estados Unidos donde lo recibió el expresidente George W. Bush y no solo hablaron de Venezuela sino también de nuestro país.
"Hablamos con Bush sobre la situación en Venezuela pero más importante que hacer un gol es evitar otro, y ese gol en contra sería que Argentina regrese a las manos de Kirchner", lanzó Bolsonaro a los periodistas que lo esperaban a la salida del encuentro con el dirigente republicano en Texas.
Fue entonces que los periodistas le preguntaron al presidente de Brasil si Bush había estado de acuerdo con sus declaraciones y respondió que "por el semblante que mostró estuvo de acuerdo".
Bolsonaro repitió su discurso y habló sobre un "retroceso ideológico de Argentina" que "provocaría una nueva Venezuela en Sudamérica".
El hombre electo para conducir Brasil por los próximos años se reunió con George W. Bush acompañado por su asesor especial en asuntos internacionales, Filipe Martins, el ministro de Economía, Paulo Guedes, el canciller Ernesto Araújo y el ministro del Gabinete de Seguridad Institucional, general retirado Augusto Heleno.