29.10.2019 / Juntos por el Cambio

Cuál es la trampa de Carrió para seguir operando en el Congreso a pesar de haber renunciado como diputada

La fundadora de Cambiemos formalizó su renuncia a la banca que obtuvo en 2017 y en una carta anunció su “decisión irrevocable” de dejar su cargo a partir del 1º de marzo de 2020, cuando Alberto Fernández le hable al Parlamento. Sin embargo, en la misma reunión en que le anunció a Macri su retiro también puso condiciones que revelan que su abdicación oculta un engaño.



La diputada oficialista y fundadora de Cambiemos Elisa "Lilita" Carrió avanzó acorde a su anuncio de que dejará la política y formalizó su renuncia a la banca que obtuvo en las elecciones legislativas de 2017. En la carta que le envió al presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, destacó su “decisión irrevocable” de dejar su cargo a partir del 1º de marzo de 2020, día que coincide con la jornada en que el mandatario electo del Frente de Todos, Alberto Fernández, brinde su primer discurso de apertura del año legislativo en el Congreso. 

Sin embargo, parece ser que la "decisión irrevocable" de alejarse de la política y de gravitar en el Congreso no es tan "irrevocable". Es que en la misma reunión en plena Casa Rosada en que ayer le anunció al presidente saliente Mauricio Macri su retiro, también puso condiciones que revelan que su renuncia contiene una trampa y que seguirá operando en el Parlamento nacional

Según publicó Noelia Barral Grigera en BAE, Carrió fue al encuentro de la mesa política de Juntos por el Cambio ayer y no sólo les dijo que colgaba los botines, sino que también les pegó a todos sus socios electorales y les anticipó que, si bien quiere dejar el Congreso, se guardará para sí una carta que en realidad implica que seguirá gravitando allí en el espacio público: el poder de veto que le otorgan la quincena de diputados que tendrá a partir de diciembre y el poder mediático de su voz.

Por si eso fuera poco, ese "poder de veto" no es a futuro, sino que es una herramienta a la que empezó a echar mano en este proceso de transición de retiro hasta el 1º de marzo. Su amigo radical Mario Negri fue reelecto por Córdoba -a quien muchos sindican como la razón de aquella chicana de "Lilita" de que seguía manejando a la UCR "desde afuera"-, por lo que Carrió espera que sea él quien continúe al frente del interbloque Cambiemos en Diputados después de diciembre.

Con ese objetivo en la mira (que de todas formas el cordobés, dicen en su equipo, estaría en condiciones de pelear por los votos de sus compañeros), la líder de la CC ya avisó que no está de acuerdo con que el mendocino radical Alfredo Cornejo -a quien nunca quiso "LIlita"- o el peronista PRO Cristian Ritondo pretendan ese lugar. El primero es muy crítico de Macri, el segundo muy vidalista. Como mucho, podría tolerar al larretista Álvaro González, sostiene el mismo artículo.

"El año que viene no estaré más en política", había dicho sin referirse directamente a una renuncia a la Cámara, aunque se preveía que podía tomar una decisión semejante. Carrió tenía mandato hasta 2021 como representante de la Ciudad de Buenos Aires, cuando había ganado con el 50,93 por ciento de los votos.