15.12.2025 / FINANZAS

El Merval en dólares volvió a caer mientras los bonos rebotaron en Wall Street


El índice bursátil encadenó su segunda baja consecutiva y profundizó la pérdida medida en moneda dura, mientras los títulos soberanos sostuvieron una leve recuperación tras la colocación del Bonar 2029N. El mercado siguió con atención las compras de divisas del Tesoro y las definiciones oficiales frente a los vencimientos de enero.






El S&P Merval volvió a mostrar debilidad este lunes y retrocedió en un contexto de cautela financiera, al tiempo que los bonos soberanos en dólares lograron extender un rebote moderado en Wall Street. La dinámica reflejó un escenario atravesado por la especulación y la expectativa en torno a las decisiones del Gobierno para afrontar pagos por cerca de 4.200 millones de dólares previstos para el 9 de enero.

El principal índice de la Bolsa porteña cayó 0,5% hasta los 2.964.552 puntos, mientras que medido en dólares descendió 1% y se ubicó en 1.953 unidades. Las acciones líderes operaron con bajas generalizadas, encabezadas por Banco Macro, Aluar y Grupo Supervielle, en una jornada marcada por el retraimiento inversor y la presión sobre los activos locales.

En paralelo, los ADRs argentinos que cotizaron en Nueva York también mostraron mayoría de números rojos, con retrocesos de hasta 2,1%, aunque Edenor logró una suba marginal. La contracara apareció en la renta fija: los bonos soberanos en dólares avanzaron hasta 0,16%, impulsados por el Bonar 2030, mientras el riesgo país se sostuvo en torno a los 623 puntos básicos.

El mercado siguió de cerca el impacto de la reciente emisión del Bonar 2029N, colocada por 910 millones de dólares a una tasa del 9,26%, por encima de lo pretendido oficialmente. Ese monto permitió cubrir buena parte de las amortizaciones de Bonares de enero, aunque dejó en evidencia el elevado costo financiero que enfrenta el país en un contexto de fragilidad externa.

Con la mirada puesta en los próximos vencimientos, la city evaluó las alternativas del Ejecutivo para garantizar los pagos sin comprometer aún más la estabilidad macroeconómica. En ese marco, la evolución de los bonos contrastó con la debilidad del mercado accionario y volvió a exponer las tensiones de un modelo financiero que priorizó el termómetro de Wall Street por sobre el desarrollo del mercado interno.