La deuda externa argentina representó el 46,7% del Producto Bruto Interno durante el tercer trimestre de 2025, el registro más elevado desde el primer tramo del gobierno de Javier Milei. Así lo informó este martes el INDEC, que detalló que el stock de deuda externa bruta, medido a valor nominal, llegó a los 316.935 millones de dólares, tras un incremento de 9.698 millones entre julio y septiembre.
Según el organismo estadístico, se trató del tercer aumento trimestral consecutivo del endeudamiento, en un período en el que el producto argentino rondó los 905 billones de pesos, equivalentes a unos 679.337 millones de dólares al tipo de cambio promedio informado por el Banco Central de la República Argentina. Con esa metodología, el peso de la deuda sobre la economía quedó apenas por debajo del pico de 56,1% registrado en el primer trimestre de 2024.
El informe oficial explicó que la suba de los pasivos se impulsó principalmente por el mayor endeudamiento de las sociedades no financieras, los hogares y las instituciones sin fines de lucro, aunque también incidió el incremento en el sector público y en los bancos. En ese marco, los préstamos concentraron la mayor parte de la variación, mientras que los pasivos del Banco Central mostraron una baja.
La deuda con organismos internacionales ascendió a 96.521 millones de dólares, más del 30% del total. Cerca del 60% de ese monto correspondió al Fondo Monetario Internacional, mientras que otra porción significativa se repartió entre el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, profundizando la dependencia financiera externa.
Por sectores institucionales, el grueso del stock de deuda se concentró en el Gobierno y en las instituciones sin fines de lucro, que explicaron cerca del 90% del total. En cuanto a la composición por moneda, el 98,4% de la deuda quedó nominada en divisas extranjeras y más del 70% correspondió a compromisos de largo plazo, una estructura que volvió a exponer la fragilidad externa de la economía argentina.