El intento del gobierno bonaerense para “reperfilar” el vencimiento de un bono de 4 mil millones que tiene en su poder el Banco Provincia quedó en punto muerto a partir del dictamen negativo de dos subgerencias de la entidad que conduce Juan Curutchet.
La gobernadora bonaerense saliente, María Eugenia Vidal, y el ministro de Economía, Damián Bonari, enviaron una carta formal a las autoridades del banco para proponer el canje de un bono de 4 mil millones de pesos por uno equivalente, pero con un año más de plazo.
Ahora,
al Ejecutivo bonaerense sólo le queda la vía del decreto o de una ley para forzar el canje del bono que tiene el BAPRO.
La primera posibilidad acarrea un fuerte costo político y la segunda necesita sí o sí el aval de la oposición, toda vez que, al menos en la Cámara de Diputados, a Cambiemos no le alcanzan las manos.