11.02.2021 / ¿Se complica el panorama internacional del líder PRO?

El FMI investigará el caso "particularmente difícil" del polémico préstamo otorgado al gobierno de Macri

Mientras el Poder Ejecutivo nacional negocia reestructurar con el Fondo Monetario los USD 45 mil millones de endeudamiento que dejó JXC, la Oficina de Evaluación Independiente del organismo internacional estudia una posible nueva investigación interna para abordar cómo y por qué se otorgó ese mega-préstamo a la Argentina en 2018.




El Fondo Monetario Internacional confirmó que estudia una posible nueva investigación interna para que se conozca y se evalúen razones y modos en los que se otorgó el polémico programa de endeudamiento a la Argentina en 2018, bajo la presidencia de Mauricio Macri, y que ahora el Gobierno nacional negocia a contrarreloj una reestructuración.

Lo informó formalmente la Oficina de Evaluación Independiente (IEO por sus siglas en inglés) del organismo de crédito internacional a través de un informe con fecha de elaboración en el 19 de enero pasado.

La IEO identificó una serie de posibles temas de evaluación para la gestión 2021-2022: son nueve propuestas de investigación entre las cuales está la “política de acceso excepcional”, en donde sobresale un “caso particularmente difícil como la Argentina”, admiten en el documento del FMI.

“(La Oficina) se ha establecido para realizar sistemáticamente evaluaciones objetivas e independientes sobre cuestiones, y sobre la base de criterios, pertinentes para el mandato del Fondo. Su objetivo es servir como un medio para mejorar la cultura de aprendizaje dentro del Fondo, fortalecer su credibilidad externa y respaldar las responsabilidades de supervisión y gobernanza institucional de la Junta Ejecutiva”, explica la OEI en su página web.

De este modo, en concreto el FMI avanza con la autocrítica, cuyo alcance no se conoce, respecto al monto récord que entregó al gobierno de Macri y que ahora la gestión del Frente de Todos, con Martín Guzmán al frente, intenta negociar hace seis meses una reestructuración de los USD 45.000 millones, que tiene com objetivo concretar para mayo.

En una de sus propuestas de investigaciones para 2021-2022, la IEO menciona que la “política de acceso excepcional” a financiamiento fue introducida en 2002 para “proveer un marco para guiar las decisiones de otorgar préstamos a países miembros por montos que exceden a los límites normales, para cubrir desajustes particularmente grandes en la balanza de pagos". Esta línea especial define cuatro criterios para justificar el acceso al fondeo.

Uno de ellos es que la deuda externa del país miembro tenga una alta probabilidad de ser sustentable, lo cual está claramente en duda en el caso de 2018.

Los otros tres criterios del FMI para aprobar desembolsos extraordinarios tienen que ver con la fuerte necesidad del país para equilibrar su balanza de pagos, la posibilidad cercana del país de volver a los mercados internacionales de crédito privado y el compromiso para implementar un programa económico del FMI. Precisamente, fue la aplicación del programa del Fondo lo que catapultó a la economía argentina al vacío, bajo al mando de Macri y sus ministros.

Algunos fragmentos del texto de la IEO son terminantes: "En diciembre de 2015, un nuevo gobierno argentino liberó rápidamente las restricciones a los movimientos de capitales. El staff no tuvo mucha chance de alertar antes de las medidas, pero los documentos internos tampoco advirtieron estas preocupaciones y estas cuestiones no aparecieron en las consultas del Artículo IV de 2016 y 2017, incluso cuando el país experimentó una salida muy fuerte de capitales y un freno en el endeudamiento de corto plazo”.

“El staff del Fondo podría haber sido más enérgico en alertar sobre los riesgos involucrados en la eliminación rápida de las restricciones del movimiento de capitales y sobre la necesidad de fortalecer el marco macroeconómico para que sea consistente con una cuenta capital abierta", agregan. 

Cabe recordar que la titular del Fondo cuando se acordó el préstamo con Macri era Christine Lagarde, quien abandonó su cargo, que ahora está en manos de Kristalina Georgieva