10.04.2021 / Lawfare

La contundente respuesta de Cancillería a la estrategia de refugio de Mauricio Macri en la OEA

El jefe de Gabinete de Felipe Solá manifestó su rechazo a la presentación del ex ministro de Justicia de Cambiemos de un informe sobre el supuesto “deterioro institucional” del país luego de que Alberto decidiera poner el Estado como querellante en la denuncia por el endeudamiento con el FMI.




“El odio los moviliza”, dijo el jefe de Gabinete de la Cancillería, Guillermo Justo Chaves al manifestarse en contra de la burda estrategia de personajes que estuvieron presentes en la administración Cambiemos.

Sucede que el ex ministro de Justicia de Mauricio Macri, Germán Garavano, presentó una queja ante el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro. En este marco, el ex funcionario de Cambiemos junto con la ex diputada Paula Bertol aseguraron que distintos hechos demuestran “el deterioro institucional que sufre nuestra democracia, amenazada por hechos que avasallan la independencia judicial y buscan impunidad violando la constitución y los derechos humanos”.

En el informe, se habla de un supuesto "deterioro institucional" de la Argentina. Aseguraron que existe "un marcado avance especialmente sobre la independencia judicial", que ven agravado por la pandemia. Por su parte, el jefe de Gabinete de Cancillería retrucó: "El ministro del lawfare y los fallos judiciales armados en partidos de pádel habla de deterioro institucional".



Para Garavano la denuncia sobre la existencia de "lawfare" durante la gestión MM es parte de una excusa del FdT con la que "el gobierno busca generar inestabilidad en los jueces actualmente en ejercicio, a todo aquel que pretenda contradecir las posturas gubernamentales, poniendo en grave peligro la independencia judicial".

Garavano mencionó además supuestas pruebas de dicho objetivo el proyecto de reforma judicial y del Ministerio Público Fiscal. También hizo referencia a una presunta persecución del "periodismo crítico" al tiempo que una intromisión del Estado para limitar la libertad de expresión.

“La política estatal resulta funcional al objetivo de brindar protección y garantizar la impunidad de quienes se encuentran acusados, y en muchos casos condenados, de ser responsables de graves casos de corrupción”, dijo de manera insólita Garavano sin hacer referencia alguna a las polémicas visitas de los jueces Borinsky y Hornos a la Casa Rosada y la Quinta de Olivos cuando Macri era presidente.