27.06.2022 / G7

En la cumbre del G7, Alberto Fernández pidió por el fin de la guerra en Ucrania y la construcción de una nueva arquitectura financiera

El Presidente además expuso sobre los Derechos Especiales de Giro (DEGs) emitidos por el Fondo Monetario Internacional y pidió por la revisión de la política de sobrecargos cobrados por el organismo internacional.




En su primera intervención en la cumbre del G7, el presidente Alberto Fernández convocó este lunes al "diálogo" para alcanzar el "cese de hostilidades" entre Rusia y Ucrania, al tiempo que abogó "por la construcción de una nueva arquitectura financiera internacional que incluya a las periferias del mundo".

"La Argentina condenó la invasión de Ucrania por parte de la Federación de Rusia. Una vez más reclamamos el pleno apego a todos los principios del multilateralismo. Creemos en la solución pacífica de las controversias y en el pleno respeto de los derechos humanos", aseveró el mandatario argentino. 

Y agregó:  "Desde un comienzo reclamamos el cese de las hostilidades. Ahora necesitamos impulsar el diálogo entre las partes involucradas. La historia da cuenta de que cada conflicto terminó con acuerdos logrados sobre la base de iniciativas concretas. Tomemos ya la iniciativa en procura de la paz. Hagámoslo antes que sea demasiado tarde". 

Fernández expuso además sobre los Derechos Especiales de Giro (DEGs) emitidos por el Fondo Monetario Internacional, mecanismo que la Argentina se vio imposibilitado de utilizar para la reconstrucción pospandemica ya que debió derivarlos para el pago de intereses de la deuda adquirida con ese mismo organismo durante la Presidencia de Mauricio Macri.

"La canalización de los DEGs a través del Fondo de Resiliencia y Sostenibilidad debe incrementarse incluyendo a los países de renta media. No deben ser instrumentos destinados a engrosar las reservas de bancos centrales que no los necesitan. Deben tener un sentido social capitalizando bancos regionales para financiar infraestructura requerida para el desarrollo que el cambio climático además exige", apuntó.

También pidió la revisión de la política de sobrecargos cobrados por el FMI, una situación que también sufre la Argentina a causa del endeudamiento de 2018: "Constituyen una penalización inadmisible en las circunstancias dramáticas que hoy vivimos". 

"Los derechos fiscales para las grandes corporaciones multinacionales, especialmente en la economía digital; el impuesto mínimo global como medio de implementación de protección climática; y un nuevo marco de tratamiento de las deudas soberanas también requieren una urgente implementación", agregó en el mismo sentido.

Por último, enfatizó: "En América Latina y el Caribe no soñamos con un nuevo Plan Marshall. Nunca tuvimos uno. Pero soñamos con un nuevo orden internacional donde los esfuerzos se equilibren y las ventajas se distribuyan con criterios de equidad. Soñamos con no ser discriminados por el mundo central y condenados a la marginalidad y al olvido".

El Jefe de Estado fue recibido por el canciller de Alemania, Olaf Scholz. en el complejo de Schloss Elmau, donde tiene lugar la la reunión de los Jefes de Estado y de Gobierno del G7. Allí, el mandatario argentino mantendrá una serie de reuniones bilaterales y formará parte de las reuniones plenarias del foro político.